La municipalidad de nuestra ciudad inauguró ayer el duodécimo monolito alegórico en el antiguo aserradero de repuestos para máquinas agrícolas de Celeste y Luis Miretti, sito en calle Mendoza 343 del Barrio Sarmiento.
El monolito fue confeccionado en cemento, con una figura en cerámica esmaltada realizada por las artistas plásticas, Menén Rognoni de Martínez, Mabel Righi y Ana María Donda, quienes trabajaron con textos redactados por el Centro de Estudios Históricos de San Francisco y fotografías del Archivo Gráfico y Museo Histórico.
Luis Esteban Miretti, pionero de la industria local, fue el impulsor y fundador de varias empresas, principalmente de la fábrica de máquinas agrícolas Luis Miretti S.A.
Andrés Miretti, nieto del fundador del aserradero, agradeció al municipio por esta tarea de recuperar parte de la historia de la ciudad a través de estos monolitos.
En la foto los familiares de Luis Miretti descubren el monolito .
UN POCO DE HISTORIA
"La instalación de la fábrica Miretti y Cía. estuvo relacionada al proceso de crecimiento de las actividades industriales ligadas a la economía de exportación,es decir, en este período se desarrolló un sector industrial vinculado al procesamiento de productos agrícolas.
¿Quién no recuerda la sirena de la fábrica? Sonido tan particular que marcaba el horario de entrada y salida de los obreros, el inicio de las actividades cotidiana de los hogares del barrio, hasta la hora del almuerzo...Entre los integrantes del taller tenemos el privilegio de contar con Victoriano García, un vecino de nuestro barrio que trabajó durante más de 52 años en Miretti. Son muchos los recuerdos que guarda Victoriano y muchas las anécdotas que reflejan la importancia de esta industria en la vida cotidiana de los vecinos, tanto a nivel social como laboral.
En este caso Victoriano prefirió narrar esta historia junto con un compañero de trabajo, el Sr. Raúl Robledo: "MIRETTI Y CIA. S.A.I.C.I.A.F"...la fría sigla de una empresa quizás no diga tanto como lo dicen las paredes de esta industria enclavada en pleno corazón del barrio.
En cada rincón de esta industria aún viven los sueños hechos realidad de Don Luis y Celestino Miretti quienes allá por el 1915 comenzaron a fabricar repuestos y elementos de madera para la agricultura de entonces; Salta esquina Echeverría fue la sede original, prontamente se trasladó a Mendoza esquina Salta y desde allí se fueron formando en el plantel de empleados, algunos de los tantos industriales que habitan en esta ciudad.
Fruto de la imaginación e inventiva de Don Luis Miretti, ya único dueño, fueron viendo la luz los zarandones, cribas o las sillas de madera que se fabricaron en un establecimiento en frente a la industria y le fue dando a sus modelos como nombre el mote de cada uno de sus hijos.
También propuso y logró la producción de energía eléctrica que fue entregando a vecinos de la ciudad.Y, ya fueron llegando los distintos productos, muchos, frutos de la impronta e inventiva; los molinos trituradores, las bombas centrífuga, las máquinas ladrilleras, distintos equipos seleccionadores pero para lograr todo ello necesitaba piezas fundidas...y también instaló un horno para hacerlas.
Es por eso que hoy cuando se pone en marcha un nuevo producto, llámese clasificadora o seleccionadora, los duendes de todos los sueños danzan al compás de las turbinas que impulsan la máquina y podemos ver cómo se transponen en un abrir y cerrar de ojos los largos años pasados en cada rincón de la fábrica; los ladrillos descascarados son mudos testigos de estos jóvenes 88 años y si podemos volver atrás en el tiempo transcurrido, veremos a Don Ernesto Del Campo en el armado; a Don José Polliotti que con sólo oír la marcha de un equipo sabía si ya podía dar el visto bueno, ver el paso apurado de Don Victoriano García por la sección tornería; los libros de contabilidad hechos a puño y letra de Don Faustino Ambrosio o las redacciones epistolares de la Srta. Margarita Aresi, por nombrar algunos de los muchos que ayudaron a que esta industria tenga la vigencia en seriedad y calidad sin olvidarnos de los continuadores, ya sea dirigencial o empleados que no escatimaron esfuerzos para lograrlo.
Quizás pasamos muchas veces frente a esta industria y el apuro de lo cotidiano no nos permite detenernos a contemplar la vieja fachada que encierra una historia importante del barrio o mejor dicho de la ciudad y que a pesar del paso de los años marcaron el camino del trabajo y que debemos tomar como ejemplo."
Fuente: Taller de Historia Oral Barrial "Historias de Barrio Sarmiento"-Fascículo nº 0-Octubre de 2004
Coordinadora del Taller:Prof.Soledad A.Martín
Fuente: La Voz de San Justo
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